Cultura

Rinden homenaje en NY al primer gran concertista mexicano de piano

El musicólogo y pianista mexicano César Reyes rindió la noche del miércoles en Nueva York un homenaje al que es considerado como el primer gran concer

por Notimex

30/10/2014 09:18 / Uniradio Informa / Cultura / Actualizado al 17/02/2023

Nueva York, 30 Oct (Notimex).- El musicólogo y pianista mexicano César Reyes rindió la noche del miércoles en Nueva York un homenaje al que es considerado como el primer gran concertista de piano en México, Ricardo Castro, quien hizo giras artísticas internacionales en el siglo XIX.

El concierto conformó el Séptimo Festival de Piano y Canción Latinoamericana de Nueva York, en homenaje al natalacio 150 de Castro, y fue organizado en el marco del Festival Celebrate Mexico Now, que es una muestra del arte y la cultura mexicanas en la Gran Manzana.

“Castro (1864-1907) es considerado el primer concertista de piano mexicano porque fue el primero que dio giras tanto en México, como en Estados Unidos y en Europa, además de que se considera como el autor del primer concierto para piano y orquesta”, asentó Reyes.

En entrevista con Notimex, Reyes explicó que el estilo de Castro es romántico, típico de la época porfirista, además de que compuso música de salón y una transcripción del himno nacional, que resultó en una obra pianística del romanticismo, con variaciones y temas encubiertos.

En el concierto ofrecido por Reyes, acompañado por la pianista japonesa Michiyo Morikawa, fueron interpretados dos valses de Castro: “Cariñoso” y “Sentimental”, además de la variación que hiciera el célebre músico sobre el himno nacional mexicano.

Titulado “Del Salón al Danzón”, el programa del recital también incluyó dos piezas de Blas Galindo (1910-1993), así como una versión a dos pianos del “Huapango” de Moncayo y del “Danzón Número Dos” de Arturo Márquez.

Respecto al festival de música latinoamericana, dedicado este año a compositores mexicanos, Reyes expresó que el mismo ha servido para ampliar la cultura musical de los neoyorquinos, y para difundir el rico acervo musical de América Latina.

“El festival ha promovido que otros músicos y un mayor público conozca las obras. En el caso de los músicos, ha hecho que muchos consigan las partituras para tocar las piezas, y ha servido para que no sólo los mexicanos y los latinos se interesen en la música latinoamericana”, aseguró Reyes.