Cultura

Especialistas estudian festejos en el cerro del Sacromonte

Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) estudian la celebración católica del Cristo negro en el cerro del Sacromonte.

por Notimex

29/04/2016 19:21 / Uniradio Informa / Cultura / Actualizado al 17/02/2023

México,  (Notimex).- Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) estudian la celebración católica del Cristo negro en el cerro del Sacromonte, Amecameca, donde conviven y sobreviven cultos de origen prehispánico.

En declaraciones al INAH, la historiadora Margarita Loera Chávez y Peniche, autora del libro "El Amaqueme y la construcción del paisaje en el Iztaccíhuatl y el Popocatépetl", indicó que previo a la llegada de los españoles, el cerro era reconocido como el Amaqueme.

Explicó que todo ritual de alta montaña se le menciona en primer lugar ya que "sus fronteras se extienden hacia un ámbito simbólico: tomando en cuenta el movimiento del sol y su ubicación frente a los volcanes, se convierte en un axis mundi, en un cerro templo que conecta lo celestial y lo terrestre".

Margarita Loera señaló que estudios arqueoastronómicos han demostrado que la cueva donde está el Cristo negro guarda alineaciones que coinciden con fechas significativas del calendario agrícola y con lugares de culto prehispánico. Por ello, sigue ritualizándose con fines de carácter agrario".

La historiadora junto con el antropólogo Ramsés Hernández Lucas, quien apoyó la investigación, aclaró que la celebración al Cristo negro sustituyó a la de Tezcatlipoca, a quien veneraban los totolimpanecas.

Respecto a esto, el cronista Chimalpahin declaró que previo a la llegada de los totolimpanecas, el Amaqueme era el lugar de la diosa de agua Chalchiuhtlicue y que el lugar donde se adoraba se conocía como Chalchiuhmomotzco.

Margarita Loera mencionó que no existió una sustitución de las cualidades semejantes entre el panteón de deidades o entidades prehispánicas y los santos o las figuras católicas.

Comentó que después de la conquista se tuvo que dar continuidad al culto, con el propósito de que los calendarios agrícolas estuvieran regulados, para tener de forma simbólica el equilibrio de la vida, entorno y del humano, "así, el culto agrícola se fue sujetando a la liturgia católica".

En la investigación se requirió la traducción de textos del náhuatl al español, para obtener datos arqueológicos, antropológicos y etnográficos recopilados en el lugar, y para esta labor se contó con rituales ligados directamente a la devoción en el Amaqueme.

Por otra parte, Ramsés Hernández mencionó que el 2 de febrero inicia el calendario agrícola y se lleva a cabo la preparación de los campos de cultivo, donde se bendice una semilla de frijol color azul a dos mil 500 metros sobre el mar para que comience a dar frutos en marzo.

"El Sacromonte tiene su festividad el Miércoles de Ceniza, cuando se hace una invocación para que el sol, que está en el punto más alto en el horizonte, descienda y entre al centro de la tierra. Ya para la primavera empieza a calentar el interior de la tierra, sube el agua que está concentrada y la tierra empieza a dar sus primeros frutos".

Los especialistas dedujeron que el 3 de mayo, Día de la Santa Cruz, es la fecha en la que se pide agua, con la cual se regarán los campos, mientras que el 15 de agosto se lleva a cabo la celebración de la Virgen de Asunción, quien es patrona de la iglesia principal de Amecameca.

Hernández explicó que la fiesta del Señor del Sacromonte inicia un mes antes de del Miércoles de Ceniza, en ese tiempo habitantes de la zona realizan actividades religiosas y cambios de varas o de "manditas" del Señor del Sacromonte.

Aclaró que para esta festividad se unen varias comunidades como San Lucas Atzala, Santiago Xalitzintla, San Nicolás de los Ranchos y Huejotzingo, del estado de Puebla.

De la Tierra Caliente de Morelos llegan grupos organizados de Yecapixtla, Atlatlahucan, Tepalcingo y Tetelcingo; así como del oriente del Estado de México: San Pedro Nexiapa, San Diego Huehuecalco, San Antonio Zoyatzingo, Atlautla, Ozumba, Pahuacán y Tenango del Aire.

"El Amaqueme y la construcción del paisaje en el Iztaccíhuatl y el Popocatépetl" es el libro más reciente del fondo editorial proyecto Eje de Conservación del Patrimonio Cultural y Ecológico en los Volcanes del INAH.