Internacional

El Juez ordena que Charlie Gard sea llevado a un hospicio para morir

Ordenaron que el bebé sea llevado a un hospicio para retirarle el soporte que le ayuda a seguir con vida.

por Agencias

27/07/2017 12:48 / Uniradio Informa / Internacional / Actualizado al 17/02/2023

AGENCIAS.- El juez Francis, el magistrado de un tribunal de Familia de Londres que dirime el dramático caso del bebé incurable de once meses Charlie Gard, ha decidido en la tarde de este jueves que el niño debe ser llevado a un hospicio, donde se le retirará el ventilador que lo mantiene con vida e 'inevitablemente' morirá 'en un corto periodo de tiempo'.

De acuerdo con el periódico ABC, el magistrado había dado de plazo hasta el mediodía del jueves a los padres del niño y al hospital donde se encuentra ingresado desde octubre, el Great Ormond Street de Londres, para que se pusiesen de acuerdo sobre cómo debe ser su final, toda vez que no existe tratamiento posible. Pero tras cinco meses de litigio la relación entre esas dos partes está muy enrarecida y han sido incapaces de alcanzar un consenso. Chris Gard y Connie Yates querían llevar a Charlie a un hospicio para poder disponer de una semana más para despedirse de él en la intimidad.

Para llevar a cabo este tema tan delicado, contaron con un equipo de médicos y enfermeras voluntarios y con la tecnología clínica necesaria para ofrecer soporte vital al bebé en sus últimos días. El hospital refutó esa oferta y alegó que iba 'contra los mejores intereses de Charlie'. Al final el juez ha venido a dar la razón al Great Ormond Street, pues ordena que el niño sea llevado a un hospicio, pero para que le sea retirado en breve el ventilador. Charlie recibirá cuidados paliativos y morirá en un plazo corto.

El juez no hará público cuándo será llevado al hospicio, ni el nombre de este centro ni en qué fecha se procederá a la desconexión. Ha advertido a los medios que incumplirán la ley si revelan alguno de esos aspectos.

El bebé padece una rara enfermedad mitocondrial, no ve ni oye, tampoco puede moverse y sufre daños cerebrales irrecuperables. Sus padres se aferraron a la esperanza de un tratamiento, pero un Alto Tribunal Británico y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos fallaron en junio que debía dejársele morir procediendo a la desconexión. El caso dio un giro cuando la cruzada de los padres a favor de la vida recibió el apoyo del Papa Francisco, al que se sumó Donald Trump. Finalmente los propios progenitores desistieron el pasado lunes de seguir pleiteando, pues el especialista neoyorquino que les había dicho que existían un 10% de posibilidades de curar a Charlie cambió de criterio tras ver al niño y reconoció que no había nada que hacer.