Baja California

Podrían BC y CA crear mecanismo para mejorar destino final de llantas

Con Tasa Anticipada de Reciclaje tendrían mismo éxito que el aluminio

por Uniradio Informa

07/02/2021 13:59 / Uniradio Informa / Baja california / Actualizado al 17/02/2023

-Con Tasa Anticipada de Reciclaje tendrían mismo éxito que el aluminio

-Concebir los productos en una economía circular es clave para la sustentabilidad

TIJUANA.- El reciclaje de llantas tendría el mismo éxito que el del aluminio y mejoraría el destino final de estos productos si existiera un mecanismo para que la Tasa Anticipada de Reciclaje (TAR), ese depósito que el usuario paga al comprar una llanta en Estados Unidos, cruzara con ella al ser importada a México.

Así lo enfatizó el ingeniero José Carmelo Zavala Álvarez, titular de la Subsecretaría de Desarrollo Sustentabledel Estado, quien explicó que en esta frontera no existe un sistema que brinde certidumbre para esta transferencia, por lo que los gobiernos de California y Baja California exploran mecanismos posibles. 

En entrevista para el Centro de Innovación y Gestión Ambiental (CIGA), recordó que el tránsito de una economía lineal a una economía circular implica buscar que cada producto y sus componentes no sean solamente usados y desechados, sino que cumplan con diversos ciclos tecnológicos, como el reúso, la remanufactura y el reciclaje.

Afirmó que esta circularidad es la clave para un desarrollo sustentable, de modo queel reúso de llantas es algo virtuoso ambientalmente y no debe limitarse, sino regularse, por ello la apuesta es mantener íntegra esa circularidad, aun cuando crucen fronteras nacionales, con mecanismos innovadores que respeten la jurisdicción de cada país. 

“La llanta cruza huérfana la frontera, sin el depósito que el comprador primario pagó cuando era nueva, eso rompe la custodia y el sistema depósito-reembolso, cometiendo un fraude al consumidor, algo que en California puede ser un delito grave, porque lo que pagó como TAR no se aplica correctamente, pese a ser un impuesto etiquetado legalmente”, alertó.

Añadió que, como sucede en los programas de colaboración transfronteriza, la idea es que la llanta usada que se importa a Baja California se acompañe de la TAR que el consumidor californiano pagó y aplicar ese recurso para el acopio de llantas de desecho, es algo lógico y legal, porque ese impuesto se creó para asegurar la correcta disposición final de la llanta. 

“El reciclado de las llantas daría origen a nuevos productos, como asfalto silencioso, tartán para pistas de atletismo, topes, durmientes de ferrocarril, impermeabilización y el exitoso sistema de estabilización de taludes diseñado por el ingeniero David Mascareño de Yantek, del que hay numerosos ejemplos en Tijuana y Baja California, taludes que han utilizado más de un millón de llantas”, explicó.

José Carmelo Zavala comentó que la circularidad de las llantas resulta obvia, porque hasta con su forma la sugiere, pero esto requiere evitar que se rompa el sistema depósito-reembolso que ha resultado tan exitoso en el aluminio, porque el 95% se recicla, demostrando que la minería urbana es más importante que la primaria. 

Recordó que la colaboración ambiental entre México y Estados Unidos tiene una gran historia de éxitos, desde la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), los Acuerdos de La Paz y sus legados, como lo son el Programa Integral Ambiental Fronterizo (PIAF), la Comisión de Cooperación Ecológica Fronteriza (COCEF) y Frontera XXI, entre otros.

Zavala Álvarez anticipó que, aunque la frontera no tiene aún el mecanismo para esta transferencia, los gobiernos de California y Baja California exploran mecanismos posibles y tal vez el Banco de Desarrollo de América del Norte (BDAN), en el marco de la colaboración fronteriza que promueve, pueda implantar algún sistema adecuado.  

Recalcó que la circularidad es un concepto que se promueve en el proyecto de Ley de Economía Circular de Baja California, una ley visionaria para construir futuro cuyo objetivo central es desacoplar el crecimiento económico de la extracción de recursos naturales, una ley de gestión de recursos que va mucho más allá que una ley ambiental o de residuos.

“Claro que debemos enfrentar el gigantesco inventario de residuos, pero conformarnos con eso convertiría a la economía circular en una trampa para seguir con los mismos patrones de producción y consumo; no, esta ley enfatiza el ecodiseño, piensa en el postconsumo y extiende el ciclo de vida del producto y sus partes, construye ciclos tecnológicos”, remarcó.

El tránsito a una economía circular agregó, se reflejará en una mejor distribución de productos y servicios, en una distribución de bienestar que combata las terribles asimetrías y fortalezca nuestras capacidades para construir futuro, tarea para la cual los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) trazados por la ONU son una guía y una inspiración.

El subsecretario opinó que entre las muchas lecciones por aprender de la actual pandemia está la necesidad de entender de otra manera al crecimiento económico, puesto que no puede seguirse aceptando el crecimiento infinito a costa del deterioro ambiental y es apremiante que esto sea reconocido como una prioridad por los tomadores de decisiones. 

“La circularidad de productos, procesos y servicios es un área para explorar soluciones, para mimetizar los procesos de la naturaleza; mantener la continuidad de flujos de materia y energía en un sistema fragmentado por fronteras sociopolíticas es un reto descomunal, pero el virus nos pone a prueba y, si logramos sobrevivir, ése será el camino”, concluyó.