Gobernador Newsom y líderes de San Francisco anuncian nuevo esfuerzo para investigar muertes relacionadas con opioides

El Gobernador Newsom y líderes de San Francisco están estableciendo un nuevo grupo de trabajo para investigar muertes y envenenamientos relacionados con opioides, con el objetivo de responsabilizar a los traficantes de drogas.

SAN FRANCISCO.- Ampliando la colaboración del estado con la Ciudad de San Francisco para abordar la crisis del fentanilo, hoy el Gobernador Newsom, la Alcaldesa de San Francisco, London Breed, la Fiscal del Distrito, Brooke Jenkins, y el Jefe de Policía, Bill Scott, anunciaron la formación de un nuevo grupo de trabajo conjunto de aplicación de la ley para investigar muertes y envenenamientos relacionados con opioides en la ciudad. El nuevo grupo de trabajo incluirá personal del Departamento de Policía de San Francisco (SFPD), la Oficina del Fiscal del Distrito de San Francisco (SFDA), la Patrulla de Carreteras de California (CHP) y la Guardia Nacional de California (CalGuard).

El grupo de trabajo abordará las muertes por opioides en San Francisco de manera similar a los casos de homicidio, utilizando procedimientos operativos estándar para documentar las muertes, recopilar pruebas relevantes, procesar información para mapear la distribución de fentanilo y las grandes organizaciones criminales, y responsabilizar a los traficantes de drogas.

"La crisis de los opioides ha cobrado demasiadas vidas, y los traficantes de fentanilo deben ser responsables, incluso, cuando corresponda, por asesinato. Este grupo de trabajo lucha por aquellos afectados por esta crisis, por las víctimas y sus seres queridos que merecen paz. Trabajando juntos, continuaremos brindando tratamiento y recursos para ayudar a quienes luchan con el consumo de sustancias y aseguraremos justicia para las familias que han perdido a sus seres queridos", dijo el gobernador Newsom.

"El fentanilo es más letal que cualquier otra droga que hayamos visto en nuestras calles", dijo la Alcaldesa London Breed. "Debemos tratar el tráfico y la venta de fentanilo con más severidad, y las personas deben saber que la venta de esta droga podría resultar en cargos de homicidio. Agradezco al Gobernador Newsom por continuar su apoyo en San Francisco, y a todas nuestras agencias de aplicación de la ley estatales por trabajar con nosotros para responsabilizar a quienes venden esta peligrosa droga. Esta colaboración continua entre las agencias de aplicación de la ley locales, estatales y federales está marcando la diferencia".

"El nuevo grupo de trabajo dotará a la Ciudad y el Condado de San Francisco con una capacidad de investigación profundamente necesaria. Tradicionalmente, las sobredosis no se han investigado como asesinatos", dijo la Fiscal del Distrito, Brooke Jenkins. "Ahora, trabajando juntos, podremos investigar sobredosis fatales de fentanilo donde se pueda recopilar evidencia para establecer una conexión con la persona que proporcionó las drogas que causaron la muerte, de manera que posiblemente puedan ser acusadas de asesinato. Los traficantes de drogas han causado la muerte de demasiadas personas en nuestra comunidad y esta nueva herramienta nos dará una mejor oportunidad para responsabilizarlos por la verdadera peligrosidad de su conducta".

"Nos negamos a quedarnos de brazos cruzados mientras los traficantes de fentanilo continúan obteniendo ganancias a expensas de las trágicas muertes que están causando en nuestra ciudad", dijo el Jefe de Policía de San Francisco, Bill Scott. "Estamos orgullosos de unirnos a nuestros socios locales y estatales para responsabilizar mejor a estos traficantes y hacer que San Francisco sea segura para todos".

"La Patrulla de Carreteras de California se enorgullece de ser parte de esta colaboración innovadora de aplicación de la ley que se está llevando a cabo en San Francisco para desmantelar las redes delictivas que impulsan el tráfico de fentanilo y, en última instancia, acabar con ellas", dijo el Comisionado de la CHP, Sean Duryee. "Nuestros investigadores expertos son insuperables en su compromiso de servir al pueblo de California, resolver crímenes y brindar justicia".

"Como parte de este nuevo grupo de trabajo, nuestros analistas de la Guardia Nacional de California trabajarán entre bastidores para conectar los puntos, identificar a los traficantes, proveedores y distribuidores para que las fuerzas del orden puedan asegurar la justicia", dijo el General de División Matthew Beevers, de CalGuard. "Hemos tenido un gran éxito desempeñando un papel similar en San Diego y Fresno, y estamos listos para esta misión".

A través de esfuerzos de investigación, recopilación de pruebas y análisis de datos, el grupo de trabajo buscará identificar y desarticular las redes de distribución de opioides en San Francisco que son responsables de sobredosis fatales y envenenamientos. Esfuerzos similares han tenido éxito en otras ciudades, como San Diego y Fresno, donde los analistas de CalGuard han contribuido al apoyo en investigaciones de muertes relacionadas con opioides. Se espera que el grupo de trabajo de San Francisco esté plenamente operativo a principios del próximo año.

San Francisco ha experimentado un alarmante aumento en las muertes relacionadas con el fentanilo. Desde que el estado inició sus esfuerzos de aplicación de la ley en San Francisco el 1 de mayo de 2023, la CHP ha incautado 18.5 kilogramos de fentanilo y ha realizado 364 arrestos por delitos graves y menores en el área de Tenderloin y sus alrededores. Los esfuerzos de la CHP forman parte de una operación colaborativa entre múltiples agencias, que incluye la CHP, CalGuard, el Departamento de Justicia de California, SFPD y SFDA. El esfuerzo conjunto se centra en mejorar la seguridad pública, apuntar al tráfico de fentanilo, interrumpir el suministro de esta peligrosa droga en la ciudad y responsabilizar a los operadores de redes de tráfico de drogas. La operación se basa en el Plan Maestro del Gobernador para Abordar la Crisis del Fentanilo y los Opioides, que incluye una expansión de operaciones respaldadas por CalGuard que el año pasado resultó en un aumento del 594% en la incautación de fentanilo y niveles históricos de financiamiento, 1,000 millones de dólares en todo el estado, para combatir la crisis y ayudar a quienes luchan con el consumo de sustancias.