Desde hace 18 años Antonio López acude al Cerro de la Virgen

Por Mónica Miranda

Hermosillo.- Ser el único devoto de la Guadalupana en su familia, no le impidió a Antonio acudir por décima octava vez al Cerrito de la virgen de Guadalupe.

Como cada 12 de diciembre, desde hace 18 años, el sonorense Antonio López se levantó de madrugada para salir a las 6:30 horas de su hogar y recorrer en bicicleta 17 kilómetros hasta llegar a la carretera México 15, en la salida Sur de Hermosillo, donde se ubica la imagen de La Morenita pintada en la cima del cerro.

Con respiración agitada, cansado por la pedaleada, el hombre dejó su bicicleta y comenzó a subir los escalones; pese a las inclemencias del tiempo, por las bajas temperaturas registradas en la capital sonorense, Antonio se preparó con vestimenta deportiva cubriendo su rostro del frío.

"Es un recorrido bastante largo pero creo que vale la pena el sacrificio para venir a agradecer a la virgen por todo lo que me ha dado y por todo lo que quiero que me conceda, sobre todo salud", dijo.

Cada año, miles de fieles devotos de la Guadalupana peregrinan para llevar ofrendas al altar.

Subir el Cerro de la Virgen es la tradición hermosillense que se celebra desde el 11 de diciembre por la tarde, cuando comienzan a llegar las personas a hacer velación y cantarle Las Mañanitas a las 12:00 de la noche.

"Tengo aquí viviendo 18 años y, desde entonces lo hago, antes lo hacía corriendo en el grupo de mi trabajo y ahora lo hago solo", compartió.

La festividad de realiza con juegos mecánicos, grupos musicales, baile y comida típica a fin de conmemorar esta tradición mexicana.