Amnistía responsabiliza al gobierno de Sudán de decenas de muertos

JARTUM.- Amnistía Internacional aseguró que tiene "informes creíbles” que ponen de manifiesto que las fuerzas de seguridad en Sudán mataron a tiros a 37 manifestantes en las protestas contra el gobierno que se registraron en los últimos días en varias ciudades.

Por su parte, el presidente de Sudán, Omar Hassan Ahmed Bashir, indicó que los "enemigos" del país africano son los responsables de las protestas recientes en contra de su gobierno y que piden su renuncia inmediata.

Bashir se ha mantenido desafiante ante las protestas en todo el país que exigen su expulsión y ante la preocupación de Estados Unidos por los "informes creíbles" de que sus fuerzas de seguridad han matado a más de tres decenas de manifestantes.

“El hecho de que las fuerzas de seguridad estén usando la fuerza letal de manera tan indiscriminada contra manifestantes desarmados es extremadamente preocupante”, afirmó la subdirectora para África del Este, Grandes Lagos y el Cuerno de África de Amnistía Internacional, Sarah Jackson.

“Con decenas de muertos ya, el gobierno debe contenerse en este mortal uso de la fuerza e impedir más derramamientos de sangre innecesarios”, señaló.

Jackson hizo hincapié en que las autoridades sudanesas “en lugar de intentar impedir que las personas se manifiesten deberían centrarse en poner fin a la represión que mantiene desde hace tiempo y en resolver la crisis económica que precipitó las protestas”.

En un discurso televisado, el presidente de Sudán acusó a "traidores, agentes, mercenarios e infiltrados" de explotar las "dificultades económicas del país para hacer sabotaje al servicio de los enemigos de Sudán".

"Sabemos que tenemos problemas económicos ... pero esto es algo que somos capaces de manejar", señaló Bashir, quien ha gobernado Sudán durante 29 años, mientras agitaba su bastón e insistía en que las naciones occidentales habían sitiado a Sudán debido a su adhesión al Islam.

Bashir hablaba este martes desde Wad Medani, una pequeña ciudad al sur de la capital, Jartum, donde cientos de manifestantes intentaban marchar hacia el palacio presidencial.

La gente ha salido a las calles de todo el país desde el 19 de diciembre después de que los recortes de subsidios ordenados por el Fondo Monetario Internacional provocaron una aguda escasez de combustible y otros productos básicos y más que duplicaron el precio del pan.

La policía antidisturbios en la capital sudanesa, Jartum, usó ayer municiones y gases lacrimógenos en un intento por dispersar a los manifestantes que marchaban hacia el palacio presidencial.

Los videos publicados en línea parecían mostrar multitudes de cientos de personas que se dirigían hacia el palacio, que se encuentra en la orilla del río Nilo Azul en el corazón de Jartum.

Se podía escuchar a los manifestantes cantando canciones patrióticas y gritando consignas contra el gobierno: "Pacíficos, pacíficos contra los ladrones" y "La gente quiere derribar el régimen" antes de que la policía comenzara a disparar contra la multitud.

Los disturbios se produjeron después de cinco días de mítines contra el gobierno del presidente Bashir, con manifestantes enfurecidos por el aumento de los precios, la escasez de productos básicos y una crisis de efectivo.

Las declaraciones del presidente de Sudán se producen cuando los pedidos para que renuncie se están haciendo cada vez más fuertes con un mayor número de personas que salen a las calles a protestar.

La protesta ha sido organizada por  la Asociación de Profesionales Sudaneses, una coalición paraguas para los sindicatos profesionales, y apoyada por el  Partido Nacional de la Umma, uno de los principales de la oposición.

Bashir prometió introducir "reformas reales" desde  que comenzaron las protestas contra el gobierno  en la ciudad de Atbara hace ocho días,  pero también advirtió a los manifestantes que no respondan a los intentos de "sembrar discordia" en el país.