La cultura de la legalidad, el camino para sumar a la paz

- La ex Secretaria de Economía Tatiana Clouthier y el abogado constitucionalista y fiscalista Luis Pérez de Acha impartieron un taller teórico- práctico en Culiacán, Sinaloa, dirigido a ciudadanos y empresarios interesados en sumarse a la cultura de la legalidad.

CIUDAD DE MÉXICO.- Con el objetivo de fomentar la reflexión sobre la necesidad de transitar hacia una cultura de la paz y la legalidad y accionar desde lo cotidiano la transformación que la sociedad requiere, Tatiana Clouthier Carrillo y Luis Pérez de Acha, impartieron el primero de una serie de talleres que realizarán durante el 2023.

En una sesión de 6 horas realizada en la Casa del Maquío en Culiacán, Sinaloa, los expositores analizaron conceptos como ética, estado de derecho y participación ciudadana, al tiempo de exhortar a los participantes a reflexionar cómo los actos cotidianos individuales contribuyen a la legalidad o a la corrupción.

La cultura de la legalidad suma a la paz cuando se respetan y cumplen las leyes establecidas como una responsabilidad personal y social, y cuando la ciudadanía junto con el Estado procuran la justicia, la equidad y la transparencia encaminadas a construir una sociedad más segura, democrática y estable, coincidieron los ponentes.

Al hablar de leyes, expusieron tres distintos tipos: las que establecen obligaciones, como el pago de impuestos, las que reconocen derechos como los de salud o educación, y las que prohíben acciones ilícitas como la evasión fiscal, el outsourcing o las empresas fantasma.

Respecto al tema de corrupción, expresaron con claridad que en esta práctica siempre hay dos posiciones: ser víctima o victimario, y en cualquiera de las dos, las consecuencias alcanzan a toda la sociedad al destruir la confianza social y mermar los servicios públicos. “La evasión fiscal y la informalidad laboral son dos formas de corrupción”, expuso tajante el abogado fiscalista.

Al ahondar en el tema, Pérez de Acha puntualizó que la construcción de una cultura de la legalidad requiere, por un lado, la participación de la ciudadanía para conocer sus derechos, actuar dentro de la ley y cumplir las obligaciones fiscales para exigir servicios de educación, seguridad, salud, bacheo, construcción de carreteras, entre otros, mientras que del lado del gobierno, las autoridades deben gastar bien, con transparencia y rendición de cuentas para que tanto gobernantes como gobernados, respondan de forma corresponsable ante el Estado de derecho.

Para cerrar el taller, realizaron un ejercicio de propuestas desde una dimensión local hacia una visión nacional, con alcance a corto y mediano plazo, en la que los ciudadanos tengan un papel central y decisivo.