Salud

Conoce los riesgos de no protegerte de los rayos UV

Aunque no podamos verlos, los rayos UV son capaces de dañar nuestra piel de distintas formas, ¿sabes cómo protegerte? Encuentra las respuestas en la siguiente nota.

El calor persiste en México según registros recientes. Es esencial proteger la p
El calor persiste en México según registros recientes. Es esencial proteger la p Archivo

26/04/2024 15:38 / Uniradio Informa / Salud / Actualizado al 26/04/2024

Es un hecho: el calor ha llegado para quedarse. Las altas temperaturas registradas en diferentes regiones de México durante los últimos años así lo indican, por lo tanto, se recomienda ampliamente que incorporemos una rutina efectiva para proteger nuestra piel contra los rayos UV

¿Conoces los daños que pueden ocasionar? En esta nota, te compartiremos información valiosa acerca del tema con el fin de que puedas tomar las medidas adecuadas y blindarte de la radiación ultravioleta. 

Motivos para tomarse en serio a los rayos UV

En primavera y verano es común que se haga especial hincapié en todo lo referente al uso de protectores solares de buena calidad, pero en realidad, es fundamental que no se descuide en ninguna época del año, ya que la radiación ultravioleta es independiente al clima; es decir, no importa si está nublado o si hace calor o frío, los rayos del sol continúan estando presentes.

En sí, la radiación UV se dividen en tres categorías: ultravioleta A (UVA), ultravioleta B (UVB) y ultravioleta C (UVC). ¿Nos tenemos que proteger de los tres? De los rayos UVC no, pues la atmósfera de la Tierra se encarga de absorberlos, sin embargo, de los dos tipos restantes sí. 

En cambio, la radiación UVA sí atraviesa la capa de ozono, las nubes y las ventanas, ocasionando que nuestra piel se vea afectada por la hiperpigmentación y que envejezca de manera prematura. Los rayos UVB, por su parte, son capaces de provocar quemaduras solares y, en el peor de los casos, cáncer.

Algo a destacar, es que la radiación ultravioleta también puede provenir de fuentes artificiales, como camas de bronceado, luces de vapor de mercurio (utilizadas en alumbrado de carreteras, avenidas, sitios industriales, estadios, etc.), y algunos tipos de láser. 

Quizá en este punto te preguntes por qué se recomienda salir a tomar el sol cada día si tiene efectos contraproducentes para la salud, lo cierto es que recibir un poco de luz solar todos los días estimula la producción de vitamina D, ¡pero eso no significa que debas colocarte directamente bajo los rayos durante horas! 

Protección solar contra los rayos UV.

Ten en cuenta las siguientes sugerencias:

  • Evita salir por tu dosis solar entre las once y las cinco de la tarde.
  • No olvides colocarte un protector solar con un SFP alto.
  • No rebases los 20 minutos de exposición.

Los suplementos son otra alternativa si prefieres descartar un paseo bajo el sol, para saber cuál es el que debes sumar a tu dieta, lo ideal es que acudas con un experto. 

Hábitos que tu piel te agradecerá

Ser conscientes de los daños generados por la radiación UVA y UVB, no significa que vamos a salir con miedo a que la luz solar caiga sobre nosotros; la clave está en adoptar medidas que nos protejan en todo momento y cambiar determinadas formas de actuar que, hoy en día, ante el panorama del daño ambiental, no podemos continuar ejerciendo.

Protección solar

Muchas personas dudan de su eficacia, no obstante, los productos formulados para este fin sí cumplen con su objetivo: impedir que la radiación ultravioleta afecte a las células de nuestra piel. 

Te aconsejamos revisar que tenga estas características:

  • Su SFP, FPS (Factor de Protección Solar, por su traducción al español), debe estar entre 30 y 50.
  • Amplio espectro, en otras palabras, que te proteja contra los rayos UVA y UVB.
  • Protección HEV (Luz Visible de Alta Energía), en especial si a diario te expones a la luz de pantallas, como la de computadoras, celulares y más. 

Recuerda escoger un protector solar según tu tipo de piel y sus necesidades, además, no olvides aplicártelo correctamente, tal cual te lo indica el producto y, retocarlo cada cuatro horas para que no pierda efectividad. 

Daños causados por rayos ultravioleta.

Consulta de modo constante los índices de UV

Cuanto más intensos sean los rayos del sol, menos tiempo tardarán en dañar la piel. Conocer los índices de UV te permitirá adoptar las medidas pertinentes, por ejemplo, si planeas realizar una actividad al aire libre.

Algunos dispositivos inteligentes ofrecen a los usuarios dicho dato, aunque también existen páginas en las que es posible obtener información actualizada sobre el tema de acuerdo a tu ubicación. 

Si se te dificulta acceder a los métodos antes mencionados, hay otra técnica llamada ·"La regla de la sombra", la cual consiste en colocarse debajo del sol y mirar la sombra que se proyecta en el suelo; si es más corta que tú, quiere decir que la potencia de los rayos UV es demasiado fuerte, derivando en un gran peligro para tu salud. 

Conoce las condiciones de tu piel

Cualquier persona es propensa a desarrollar algún padecimiento en la piel a causa de la radiación ultravioleta, no obstante, algunas corren un riesgo mayor. ¿Quiénes?:

  • Individuos con piel sensible.
  • Con piel, cabello u ojos de un tono claro.
  • Con demasiados lunares y/o pecas.
  • Gente con antecedentes de quemaduras solares.
  • Con familiares que hayan tenido cáncer en la piel.

Si te encuentras en alguno de estos casos, te invitamos a extremar las precauciones que te hemos brindado a lo largo del texto, o bien, que acudas con un profesional ante la más mínima sospecha de una quemadura generada por el sol. 

Conclusiones

El sol no es nuestro enemigo, simplemente no hay que pasar por alto los agravios que los rayos UV pueden ocasionarnos y aprender a protegernos con la ropa y los productos adecuados, así como buscar espacios con sombra cuando nos encontremos fuera y la radiación ultravioleta sea alta. 

La próxima vez que te encuentres con una oferta en un protector solar que cumpla con los parámetros que te compartimos, no pierdas la oportunidad de adquirirlo. Cuidemos de nuestra salud y disfrutemos del verano con responsabilidad.