SD frustró más de 100 intentos de contrabando durante en enero

Una sola estación de la Patrulla Fronteriza en San Diego frustró más de 100 intentos de contrabando durante el mes de enero

SAN DIEGO.- En enero, la Estación de la Patrulla Fronteriza de Brown Field, en el sector de San Diego, encontró una cantidad significativa de eventos con migrantes indocumentados que eran contrabandeados en vehículos. En un solo día, el 20 de enero, los agentes de la Patrulla Fronteriza de Brown Field interceptaron un total de 12 vehículos involucrados en el contrabando.

El foco de las operaciones contra el contrabando fue un tramo de 25 millas de la Ruta Estatal (Carretera) 94, la Ruta Estatal 188 en Tecate, California, y Otay Lakes Road, en Jamul y Chula Vista, California.

A lo largo de enero, los agentes que patrullaban estas áreas interceptaron e incautaron más de 130 vehículos involucrados en el tráfico de personas y arrestaron a más de 150 presuntos contrabandistas.

Si bien este es un número significativo de arrestos, solo una pequeña fracción de estos eventos hace que el conductor no cumpla cuando los agentes intentan detenerlo. De los más de 130 eventos, solo siete no lograron ceder el paso a los agentes.

“Cuando confías en los contrabandistas para cruzar nuestras fronteras, te estás poniendo en peligro”, dijo el agente jefe de la patrulla del sector de San Diego, Aaron M. Heitke. “Alentamos a todos los que quieran ingresar a nuestro país a usar nuestros puertos de entrada porque son legales y seguros. Los traficantes de personas son criminales que infringen nuestras leyes. Hemos visto un aumento de traficantes que portan armas y usan tácticas inseguras, poniendo así en peligro la vida y la seguridad de los migrantes, el público y nuestros agentes”.

El 3 de enero, la Patrulla Fronteriza observó a cuatro personas salir de una maleza densa y entrar rápidamente en un automóvil que se había detenido en el arcén de la ruta estatal 94. Los agentes detuvieron el vehículo, que estaba ocupado por un conductor y un pasajero en el asiento delantero, así como por tres personas adicionales acostadas en el asiento trasero.

Todos los pasajeros admitieron estar presentes ilegalmente en los Estados Unidos y fueron arrestados. El conductor, ciudadano estadounidense, fue arrestado y acusado de contrabando de extranjeros. Una búsqueda del vehículo reveló una pistola, ubicada en la guantera, cargada con un cargador de alta capacidad que contenía 14 rondas. El conductor fue acusado de contrabando de extranjeros y el arma fue entregada a los oficiales de la Oficina de Administración de Tierras.

En la noche del 9 de enero, los agentes observaron que un vehículo recogía personas en Otay Lakes Road. Los agentes detuvieron el vehículo y notaron a una persona sentada en el piso del asiento del pasajero delantero, tratando de ocultarse. En el asiento trasero, los agentes observaron a tres sujetos más uno encima del otro, intentando ocultarse. Los agentes interrogaron a los pasajeros y todos admitieron estar presentes ilegalmente en los Estados Unidos y posteriormente fueron arrestados.

El conductor fue puesto bajo arresto y acusado de contrabando de extranjeros. También se descubrió que el conductor estaba operando el vehículo con una licencia de conducir suspendida. Se contactó a la Oficina de Administración de Tierras y llegó para emitir una citación por conducir con una licencia suspendida.

Las verificaciones de registros revelaron que el conductor había sido liberado recientemente de la cárcel y actualmente estaba en libertad condicional por poner en peligro a un niño y transportar una sustancia controlada.

Durante un registro del vehículo, se encontró chaleco antibalas en la cajuela. Se contactó a una agencia asociada y respondió, arrestando al conductor por ser un delincuente en posesión de chalecos antibalas. El Departamento de Libertad Condicional del Condado de San Diego también fue informado del arresto, lo que permitió que el oficial de libertad condicional del sujeto tomara las medidas apropiadas adicionales.

Otro incidente ocurrió la mañana del 26 de enero cuando los agentes observaron que cuatro personas salían de la maleza al borde de la ruta estatal 94 y entraban a un vehículo. Cuando el conductor se detuvo más tarde por su cuenta, los agentes se detuvieron para interrogar a los ocupantes del vehículo.

Los agentes notaron que la ventana del pasajero trasero se había roto y el sistema de encendido parecía estar alertado/dañado. Los agentes observaron a una persona acostada en el asiento trasero y otras tres personas ocultas dentro del maletero.

Los tres individuos de la cajuela y el que estaba en el asiento trasero admitieron estar ilegalmente en Estados Unidos y fueron puestos bajo arresto. Tanto el conductor como el pasajero delantero (ciudadanos estadounidenses) fueron arrestados y acusados de contrabando de extranjeros. Las verificaciones de registros revelaron que el vehículo fue robado y que el conductor tenía una orden de arresto pendiente. Una agencia asociada respondió, arrestó al conductor por la orden judicial y la posesión de un vehículo robado.

Todas las interdicciones realizadas por la Estación de la Patrulla Fronteriza de Brown Field en enero resultaron en el arresto de más de 300 migrantes de contrabando. En tres de estos hechos, los contrabandistas estaban en posesión de armas de fuego; aumentando el peligro para los migrantes, los agentes y el público objeto de tráfico.