Federación suspende programa; deportados terminan en la calle: DMAM

Por: Octavio Fabela

TIJUANA.- Por alguna causa, el gobierno federal suspendió el programa de atención y seguimiento a los mexicanos deportados denominado “Somos Mexicanos”, por esta razón, muchos connacionales que son expulsados de Estados Unidos bajo el Título 8, terminan en situación de calle.

Algunos de ellos, caen en las adicciones y forman parte de la comunidad que deambula en el Centro de la ciudad o vive en la zona conocida como “El Bordo”.

Lo anterior fue confirmado por Enrique Lucero Vázquez, Director Municipal de Atención al Migrante (DMAM), quien estimó que la mitad de las personas que viven en situación de calle en el Centro y zona de "El Bordo", son mexicanos deportados que no recibieron atención al llegar a México.

Recordó que con el programa federal el Instituto Nacional de Migración (INM), recibía a las personas deportadas. Los acompañaba hasta su ciudad natal y después había otro grupo de personas que los ayudaban a reintegrarse a la vida laboral, pero que sin previo aviso ese acompañamiento oficial, fue suspendido.

Añadió que el aumento de migrantes que llega a Tijuana es notable pero no se tiene un registro oficiales de los desplazados, por lo que esperan que El Colegio de la Frontera Norte (El Colef) o la jurisdicción sanitaria puedan realizar la encuesta debido que ellos no tienen la infraestructura para poderlo hacer.

“No tenemos un estudio actualizado de cómo está la situación, cuántas personas están la situación que requieren una atención psiquiátrica, cuántas personas están el proceso de adicción ni de cuántas personas no tiene un hogar y por ello están durmiendo en la calle”, detalló el Director Municipal de Atención al Migrante.

En otro orden de ideas, Enrique Lucero Vázquez señaló que actualmente el flujo migratorio de personas que llega a Tijuana son familias desplazadas por la violencia, principalmente en los estados de Guerrero y Michoacán, por esta razón, los albergues que los atienden se encuentran a su máxima capacidad.

Refirió que quienes están pernoctando a las afueras de lugares como la Casa del Migrante, son personas principalmente de origen haitiano entre quienes existe la percepción equivocada de que permanecer en un albergue los favorecerá en su trámite migratorio ante Estados Unidos.

Añadió que la mayoría de las familias que deciden irse a algún albergue son parte de la “oleada” de ciudadanos haitianos que llegaron a la ciudad en el mes de diciembre del año pasado.

Habitantes de la canalización, principalmente deportados: activista

TIJUANA.- Tras nueve años del primer esfuerzo por retirar a las personas que viven en el canal del Río Tijuana, el problema no se ha resuelto y la mayoría de quienes habitan en ese lugar son mexicanos deportados de Estados Unidos, a quienes el estado mexicano ha abandonado luego de servirse de las remesas que enviaron mientras trabajaron en la unión americana.

En entrevista, Sergio Tamai, dirigente de Ángeles Sin Fronteras, recordó que el próximo domingo 7 de agosto se cumplirán 9 años de que instaló un campamento en conocido como “El mapa”, y que en ese lugar atendieron a mexicanos deportados que fueron desalojados de la canalización durante el gobierno municipal encabezado por el Doctor Jorge Astiazarán Orcí.Tamai exigió que el gobierno federal destine una partida especial para atender a toda la población deportada que actualmente se incrementa hasta en 300 diariamente, según cifras del Instituto Nacional de Migración (INM).

Todos ellos son abandonados a su suerte sin un programa para reintegrarlos en su país, dijo. 

Anunció que la próxima semana realizarán una marcha hacia el Palacio Municipal de Tijuana y a la sede de la Secretaria de Bienestar Federal para exigir que ambos gobiernos pongan en operación un campamento en el que las personas deportadas sean recibidas y tratadas por su problemas médicos y sean reintegradas a la vida laboral de la ciudad,

Recordó que el último intento por evitar que los deportados vivieran en el canal del río se realizó durante la administración estatal de Jaime Bonilla pero en esa ocasión se gastó dinero y se recluyó a las personas indistintamente en centros de rehabilitación, lo que  -evidentemente- no funcionó por que ya se cuentan por miles los que viven en el interior de la canalización del Rio Tijuana y se han expandido a la Zona de Playas, causando problemas entre los vecinos.

Personal de la SS BC lleva atención a residentes de canalización

- Con la detección y prevención de Infecciones de transmisión sexual, como VIH, Sífilis y Hepatitis C.

TIJUANA.- Como parte de las acciones de seguimiento a la salud de personas en situación de calle, personal de Medicina Preventiva del Estado y de la Jurisdicción Sanitaria No. 2, de la Secretaría de Salud Estatal de Baja California, acudieron a la canalización del Río Tijuana para aplicar pruebas rápidas de detección de VIH, Sífilis y Hepatitis C, asimismo se les ofreció información para prevenir estas infecciones y se les entregó de paquetes de condones.

La encargada del Programa VIH/ Sida, Infecciones de Transmisión Sexual y Hepatitis C, Norma Alicia Olmedo, explicó que en esta actividad asistieron personal médico, de enfermería, así como de trabajo social.

Además de los servicios de salud, a 80 residentes de la canalización, se les entregó cubre-bocas y gel anti-bacterial, para prevenir contagios de COVID 19. Con estas acciones, se retoma la atención a las personas en situación de calle, misma que había entrado en una pausa por la pandemia.Caso de éxito en la canalización del Río TijuanaEl personal del programa de VIH/sida e ITS del departamento de Medicina Preventiva de la Jurisdicción tiene una larga historia de prestar servicios de salud en la Canalización del Río Tijuana.

De hecho, encontraron a un paciente que ha recibido información previamente y derivado de eso, acude a consultas al Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención en SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (CAPASITS), ubicado en la Zona Este de Tijuana.

Esto significa que el paciente se traslada varios kilómetros a fin de recibir atención médica y por su tratamiento, para recuperar su salud.