Baja California

SHCP busca recaudación fiscal violando los derechos del contribuyente

A través de la ley el sistema de recaudación evitó que se diera una colecta ejercida por presión y amenazas.

por Uniradio Informa

08/05/2019 14:35 / Uniradio Informa / Baja california / Actualizado al 17/02/2023

Por: Octavio Fabela

TIJUANA.- A través de la ley el sistema de recaudación evitó que se diera una colecta ejercida por presión y amenazas, pero la Secretaría de Hacienda y Crédito Público se ha dado a la tarea de retroceder en el tiempo y volver a estas malas prácticas, condenó el abogado fiscalista, Adolfo Solís.

Denunció que el objetivo de la modernización del sistema era precisamente dejar atrás a los actos de sujeción que ejercían los recaudadores sobre los contribuyentes, pero ahora decidieron regresar a este vehículo de presión y mecanismos que se ejercen para tratar de hacer una recaudación más eficaz, que se traduce en violencia y la criminalización de infracciones tributarias.

Al meter a la cárcel a las personas que no pagan se tiene el concepto de que accederán a hacerlo, pero el abogado fiscalista recalcó que las ciencias penales en este sentido no van de la mano con las financieras, y este método carece de validez.

"Si usamos técnicas penales, de presión, de represión, de control, de sujeción, son las mismas técnicas que se utilizaron hace un siglo, y eso es lo que tiene preocupado al sistema académico. Los académicos lo que nos preguntamos es por qué estamos en un retroceso social", manifestó.

Al hacer un recuento de la evolución de la recaudación que data de la época colonial a la actual, Solís reconoció que existe un avance en Derechos Humanos respecto a este ejercicio, pero a la par se ve un retroceso cuando hoy por hoy el funcionario busca criminalizar las infracciones, acción que no ocurre en países desarrollados, sino por el contrario se les invita a pagar y en caso de incidir en la infracción, obtienen sanciones que no terminan en prisión.

Explicó que a través de cartas invitación se cita a los contribuyentes a acudir a las oficinas, y es ahí donde se les presiona para que realicen sus respectivos pagos.

"Está bien invitarlo, está bien comunicarle sus inconsistencias, está bien decirle donde hay errores, pero otra cosa es obligarlo, presionarlo o asustarlo o amedrentarlo para que pague. Son cosas muy diferentes. Un sistema moderno no debe permitir las amenazas", sentenció.

Desafortunadamente, concluyó el abogado fiscalista, los contribuyentes no pueden tomar acciones jurídicas para defenderse porque los recaudadores no dejan rastro de las amenazas, y como las invitaciones no tienen un efecto técnico-jurídico, y tampoco existen minutas o actas ni documentos o videos para registro, los abusos continúan.