"Levantan" a tres periodistas en Taxco, Guerrero
ACAPULCO, Gro.- Tres periodistas y dos de sus familiares fueron privados de su libertad en Taxco, Guerrero, en dos hechos distintos.
Se trata del reportero Marco Antonio Toledo Jaimes, la comunicadora Nayssa Arce Avilés y el periodista Alberto Sánchez.
El domingo 19 de noviembre Marco Antonio Toledo Jaimes fue sacado a la fuerza de su domicilio, en el lugar conocido como Huixteco, entre el barrio Guadalupe y Agua Blanca, junto con su esposa, Guadalupe Denova y su hijo Alberto.
Toledo Jaimes es reportero del Espectador de Taxco, La Crónica y de un noticiario de Acapulco.
Sobre este caso, la Fiscalía General del Estado (FGE) emitió una ficha de búsqueda por la desaparición de Toledo Jaimes, su esposa e hijo. Hasta ayer las autoridades de Guerrero no habían dado con su paradero.
La esposa del reportero, Guadalupe Denova, es directora de un jardín de niños y su hijo Alberto Toledo labora en el hospital general Adolfo Prieto en Taxco.
De acuerdo con versiones, Toledo Jaimes había recibido "advertencias" de que "le bajara" con la información que estaba publicando.
En su página editorial, el periódico La Crónica exigió al gobierno estatal la inmediata libertad y presentación con vida de su reportero.
El miércoles fueron privados de su libertad la comunicadora Nayssa Arce Avilés y su esposo Alberto Sánchez. Julissa Natzely Arce, hermana de Nayssa Arce, denunció el hecho en un video en redes sociales.
"Mi hermana Silvia Nayssa Arce Avilés y mi cuñado Alberto Sánchez, quienes son periodistas, fueron privados de su libertad por civiles armados en Taxco, Guerrero. Fueron levantados por civiles armados y necesito su ayuda para compartir esta noticia y que regresen a mi hermana y a mi cuñado".
Silvia Nayssa Arce fue directora de Comunicación Social durante los dos últimos gobiernos de Taxco, con el priista Omar Jalil Flores y con el panista Marcos Efrén Parra.
Por amenazas que recibió por parte de la delincuencia organizada, Silvia Nayssa cerró su portal de noticias La Pulga Biónica.
De acuerdo con la FGE, en ese municipio operan los grupos criminales de La Familia Michoacana y La Federación.
Taxco se está convirtiendo en una zona de silencio, ejercer el periodismo es peligroso; muchos reporteros han decidido autocensurarse y otros se han desplazado.