México con políticas frágiles para frenar la pobreza laboral

-Sin políticas públicas para cubrir las consecuencias de la pobreza laboral mexicanos harán uso de la informalidad y otros esquemas para subsistir.

CIUDAD DE MÉXICO.- La pobreza laboral impacta a 54.9% de la población mexicana y este escenario se agudiza al carecer de políticas estructurales en el país para atender la pérdida de empleo, producto del impacto por Covid-19, y la disminución del ingreso laboral en los hogares, aseveró Armando Leñero, presidente del Centro de Estudios para el Empleo Formal (CEEF).

“Es importante crear mecanismos de respuesta de corto plazo para asegurar un rápido apoyo a los hogares en situación de pobreza. Un préstamo, como se ha manejado hasta el momento, no es una solución de largo alcance”, señaló el directivo.

En 2014, el 43% de la población se encontraba en pobreza laboral y para 2020 se registró un índice histórico en el aumento de 20 puntos porcentuales en este índice, lo que equivale a 10 millones de personas sin ingreso suficiente para cubrir una canasta básica alimentaria, de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

Para el presidente del CEEF, en condiciones de apremio económico, las personas con menos recursos económicos tienden a recurrir a esquemas como empleo informal, trabajo infantil e, incluso, pedir a un familiar mayor que regrese al trabajo para juntar ingresos y resolver sus necesidades. En el primer trimestre de 2020, el número de ocupados informales era 31 millones en contraste con los 24.3 millones de formales, es decir, el sector informal es 27.6% más grande que el formal.

Agregó que un segundo desafío es no contar con políticas públicas que atiendan a la población con un ingreso medio, lo cual únicamente se consigue con la generación de empleos formales. Sino se atiende esta necesidad “habrá un movimiento de escaño”, que significa que la gente con ingreso medio entrará en una situación más precaria y aquellos con pobreza asociada a no tener si quiera para comer no podrá salir fácilmente de este escenario, reconoció Leñero.

En 2019, los mexicanos con hasta un salario mínimo sumaron 11 millones 060 229 personas, mientras que en 2020 la cifra supera los 12 millones 533 mil personas.

Empleadores sin apoyos para contratar

Aunado a la imposibilidad de que los empleadores otorguen prestaciones a sus trabajadores, porque no cuentan con estímulos fiscales para contratar bajo la ley, México puede entrar en una situación de mayor vulnerabilidad tras la reforma al Sistema de Pensiones, que comenzará en los siguientes dos años, pues aumentará la carga económica de los empleadores cuando el pago de pensiones pase de 5.15 al 13.87 por ciento.

“El hecho de que la pobreza laboral aumente, sumado al poco diálogo con los empleadores coloca a México en una situación crítica porque pareciera que la formalidad no es un tema de peso en la agenda política”, puntualizó Armando Leñero.

“Hoy tenemos problemas en los cuales poner la mayor atención, como empleadores y Gobierno: por un lado baja la demanda de productos y servicios, que orilla a despedir a más gente, y, por el otro, no se focaliza la atención en apoyos para que los empleos no se pierdan”, añadió Leñero.

Especialistas del CEEF consideraron que es importante la creación de mecanismos que den respuesta a los sectores de la población más vulnerables: jóvenes y mayores de 60 años, así como a las industrias de servicios y comercio, áreas que han registrado el mayor impacto en el desempleo, producto de la pandemia por Covid-19.